Sales a dar una vuelta con tu patinete y llegas a casa con él que da pena verlo. Fango, piedras… ¡de todo en él! ¿Quieres dejarlo como el primer día? No es ningún sueño ni quimera. Es posible y bastante sencillo.
Hoy traemos la rutina que usamos en 360Scooters cuando necesitamos hacer una limpieza profunda sobre los patinetes de nuestros clientes. Ya sabes que el propio uso y rodaje de los vehículos, hace que poco a poco vayan cogiendo suciedad, es algo totalmente normal que todo usuario sufre con el paso de los kilómetros y del uso del patinete.
Y de seguro que te has preguntado mil veces cómo limpiarlo ¿Con toallitas? ¿Trapos? ¿Al autolavado del coche? ¡STOP! Atentos porque les traemos la solución para dejar el patinete como la patena ¡Vamos allá!
Nada de chorros de agua.
Evidentemente descarta chorros de agua ¡Tu patinete tiene elementos eléctricos y electrónicos que pueden dañarse con el agua! Para ello, pulveriza una capa de espuma para neumáticos sobre la lija del patinete -sí, esa que ya tienes marrón- y la cubierta de los neumáticos. Echa, echa. Sin miedo. Pero no te pases demasiado. Y cuidado con los discos de freno. Solo déjalo actuar durante un minuto.
Ahora coge un cepillo de cerdas fuertes -de esos que tienes en la cocina o el baño- y frota toda la superficie de la lija, insistiendo en las zonas más sucias. Igual con los neumáticos, pero en estas zonas utiliza una brocha o un cepillo de dientes. Aprovecha, si puedes, del movimiento de la rueda en marcha. Repite las veces que hagan falta para que veas que está todo como lo quieres y deja secar al aire sin problema.
Para las manetas, los guardabarros, elementos de plástico… pulveriza con mucho cuidado un hidratador de plásticos sobre un trapo y frota hasta eliminar la suciedad. Aprovecha para limpiar el resto del patinete con este mismo trapo húmedo y tu patinete quedará, ¡como nuevo!